PARA PEPA
Querida Pepa:
A ninguno nos han enseñando a despedirnos de la gente que queremos. En la escuela debería haber una asignatura en la que aprendiéramos a hacerlo sin sentir tanto desgarro. Ayer estuvimos todos juntos para decirte adiós, vimos a tu marido, a tus hijos, tu madre y tus hermanos desconsolados, sin poder creer lo que les estaba ocurriendo.
Allá donde estés sé que les ayudaras a que cuando pase la rabia, el dolor, la incredulidad por tu partida, recuperen la paz que han perdido por tanta lucha con tu enfermedad y tu sufrimiento.
Yo me quiero quedar con lo positivo, con el recuerdo de tu risa, tu sentido del humor, tu ternura, tu saber escuchar, tu coquetería, con esa niña rubia de ojos azules que un buen día llegó a nuestra parroquia buscando un grupo de amigos y a la que recibimos con los brazos abiertos ¡¡cuantos ratos de risas, de confidencias, de juegos… !! .
Desde este blog, del que tanto disfrutaste, en el que tanto participaste, donde nos reímos tanto la una de la otra con nuestra fingida rivalidad para hacer reír a los demás, te deseo que la paz vaya contigo, amiga mía, porque con tu ejemplo de vida has conseguido “dejar este mundo mejor de lo que lo encontraste”.
Te has ido con las manos llenas de amor y eso lo demuestra la cantidad de gente que ayer te fue a despedir, has dejado una estela muy grande de cariño, de admiración, has sido un ejemplo de cómo luchar por vivir y hacer felices a los tuyos hasta el ultimo momento..
Ayer para despedirme de ti me puse tacones, me pinte los labios, como a ti te hubiera gustado (seguro que te arranque una sonrisa) y no era para menos fui a decirle adiós a la REINA DE LA SAUCEDA
P.D.
Andrés, ayer te dije que llores, grites, patalees, que dejes que aflore la rabia, el dolor, la tensión de todos estos meses. Pero después cuando poco a poco vuelva la calma déjate ayudar y si este blog te sirve aquí estamos deseando ayudarte y compartir contigo este proceso tan difícil. Cuenta con la Vieja Tropa. Te queremos
2 comentarios
Juan Rodriguez -
Han pasado tan solo 2 dias que no la tenemos entre nosotros y la verdad que no hay un momento en el que no me venga a la memoria su cara, su sonrisa y todo lo que ella me aportaba a mi vida, pues habra hermanos que se quieran igual que nos queriamos nosotros pero no mas, es dificil encontrar palabras de agradecimiento para tantos y tantos amigos y compañeros que os disteis cita para despedir a esa GRAN MUJER, GRAN AMIGA, GRAN MADRE, GRAN MUJER Y GRAN COMPAÑERA que fue mi hermana PEPI, porque por donde paso dejo huella.
Se me amontonan ahora mismo todos los recuerdos que tengo de ella, donde con solo mirarnos sabiamos lo que queriamos, porque siempre estaba dispuesta a todo, recuerdo que en sus ultimos dias se me ponia a llorar porque cuando estuve ingresado hace unos meses y ella no pudo estar como tantas y tantas veces al pie de mi cama y a la de tantas personas porque se desvelaba por ella sin esperar nada a cambio.
Habra que inventar un diccionario de adjetivos para poder recopilar todos y cada uno de ellos que pude escuchar el dia que le deciamos adios, y no puedo olvidar la figura de mi cuñado Andres el que ha estado dia y noche como se dice al pie del cañon y por supuesto a mis dos hermanas Ana y Mayte y a sus hijos Bea y Andres que entre todos hemos formado pues los pilares donde ella en cada bajon que tenia (que fueron muchos en este ultimo mes) se apoyaba y entre bromas de uno y ganas de no perder la batalla a esa temible enfermedad tenia ella, me quiero quedar cuando despertaba y abria esos grandes ojos azules y no le hacia falta hablar porque desde luego mas de una vez nos ha dejado con la boca abierta de lo claro que lo tenia todo y de las ganas que tenia de luchar porque siempre lo fue una luchadora y creo que en el lugar que este seguira haciendolo, tendra ahora el apoyo de mi padre y el de mi hermano se reencontrara con ella y con otros muchos amigos que se fueron antes que ella, pero seguro que sabra que aqui abajo ha dejado una gran familia y que en cierto modo el dia que nos llegue reunirnos con ella al menos iremos contentos de saber que alli estara esperandonos para darnos todo el cariño y el amor que durante sus 51 años derrocho entre nosotros.
Se me ahogan las lagrimas y ya no puedo escribir mas, pero no quiero dejar de decir que como se suele decir ahi que seguir adelante pero con la certeza que en los momentos malos (que los tendremos) ella nos levantara y nos dara fuerza para seguir.
Os quiero a todos y os doy las gracias por el apoyo que me habeis dado y por hacerme pasar este duro trance de una forma mas asequible si se puede llamar asi, aunque el dolor perdure en mi y como empece diciendo no pasa un momento que no tenga en el pensamiento a mi QUERIDA HERMANA PEPI.
Andicozmania -
Os quiero.